15 Jun La violencia y el perverso juego del machismo…
Paloma A. González Loché
Algo va mal, muy mal en el país. Lo peor de todo es el déficit de sentido común que llega a afectar hasta a las leyes y se cree como “dogma de fe” saltándose por un forro principios tan fundamentales en un estado democrático como la “presunción de inocencia”.
La mal llamada violencia machista. La ira muchas veces va acompañada de actos tremendos en los que puede llegarse al crimen sea por puro arrebato, el alcohol, drogas, pero no es una “condición nata” de la persona sino una consecuencia y tienden a descargar su furia que, generalmente, es por insatisfacción personal, con seres más débiles: esposas, hijos o mascotas. Un resultado de muerte es desgraciadamente posible si se va la medida y las víctimas no reaccionan porque se convierten en el “saco terrero” donde ahogarán su ira y frustración los, en el fondo, cobardes y débiles. Ahí es posible que hablemos de violencia machista, pero no en todos los casos.
La figura del psicópata jamás debe confundirse con un caso similar al citado. Lo que diferencia a éstos del machismo ¡¡¡y es algo que también se produce con las mujeres!!! es la absoluta ausencia de empatía hacia sus víctimas y, en consecuencia: el deseo de acabar con ellas causando el mayor dolor posible por no haberse rendido a sus deseos en un momento dado.
Si hablásemos con propiedad, lo podríamos distinguir fácilmente. Una esposa que abandona a un marido deja como único recurso para el psicópata asesinarla o infligirle el mayor dolor posible: asesinar a sus hijos como venganza por el abandono. ¿Es eso machismo? Evidentemente NO. Eso es una crueldad premeditada (lo que se distingue del caso anterior como rapto de ira o provocado por alguna causa: drogas, alcohol, etcétera).
Esto también se da en mujeres, aunque la prensa evite hablar de ello. Recientemente tuvimos el caso de una mujer que asesinó a su hija de cuatro años “para causar el mayor daño posible al marido por no volver con ella” tal como ella misma reconoce. ¿Hasta ese punto? Esto rompe el esquema y no sale ya en medios de comunicación o se diluye por no ser “vendible” como violencia machista.
¿Recuerda alguien la premeditación de la mujer que asesinó al hijo de su novio: “el Pescaito”? y al parecer no fue el único caso: el motivo es que… obstaculizaría sus planes y allí estaba, llorando y compungida junto al padre ¡mientras tenía al niño muerto en el maletero de su auto!
El caso de las niñas tinerfeñas así como el caso de los hijos de José Bretón tienen en común que fueron asesinatos a sangre fría, premeditados y con intención de causar el mayor dolor a la madre: violencia vicaria. Esto no es obra de un “machismo” (acto sobrevenido cuando es auténtico, aunque a veces sea continuado por circunstancias), es un acto de un PSICÓPATA, que se caracteriza porque no es una enfermedad mental, sino el trastorno de una conducta y que en ningún momento puede calificarse de arrebato porque en estos existe una clara premeditación y lo esencial: ausencia total de emociones y empatía ¡¡¡que llega a alcanzar a sus propios hijos!!! A los que utiliza como herramientas para obtener sus fines. Al igual que la madre que recientemente asesina a su propia hija y por idénticos motivos. Esto ha de cambiar en las leyes urgentemente y empezar a llamar a las cosas por su nombre.
Otro error garrafal de la llamada “violencia machista”. Una mujer muere en su casa y automáticamente su esposo es detenido por un crimen machista sin mediar explicaciones, sin presunción de inocencia posible ¡desde noviembre! Obviamente queda libre al quedar demostrado que la causa del fallecimiento, meses después, fue natural y debido a un infarto. ¿Quién resarce a este esposo del doble sufrimiento padecido por la pérdida y la cárcel?
Algunas leyes, tienen que cambiar y reubicarse en el lugar que procede, dejando a un lado las “modas” y estupideces varias, tomando muy en serio lo que hay y calificando muy bien cada caso.
Por cierto: hay muchos más psicópatas de lo que creemos, pero sus conductas son identificables. No son “enfermos” y por ello son difíciles de detectar si quieren ocultarlo. Saben muy bien cómo atraer a sus víctimas, ellos y ellas, porque son plenamente hábiles en reconocer a personas empáticas a las que pueden manejar, convirtiéndolas en víctimas hasta que ya es tarde…
—o0o—
P.S. Recomiendo bajar “La Triada Oscura de la Personalidad en las relaciones íntimas” (J.M. Pozueco y J.M. Moreno) está en formato pdf., donde encontrarán una explicación mucho más extensa al respecto.
Helena
Publicado a las 09:36h, 15 junioBravo Paloma, como siempre, haces una reflexión impresionante y que hará que quienes lo lean, recapaciten.
@dmin
Publicado a las 12:07h, 15 junioMil gracias, querida Helena:
¡Ojalá! Ojalá sirva para no dejarnos llevar y que pensemos. Siempre fue mi objetivo, ya lo sabes.
Un beso muy fuerte y espero que nos veamos pronto.
Jose Manuel Millán
Publicado a las 09:42h, 15 junioPues claro Paloma, lo que pasa es que unos «listo» han querido aprovechase de las desgracias ajenas para asaltar el poder y lo primero que han hecho es intoxicar a los medios con sus teorías de un nuevo orden y una nueva sociedad pero con recetas que se basan en fomentar el odio para manejar a los ciudadanos. No son los primeros. Casos similares, pero muchísimo más crueles, se dieron con Pol-Pot en Camboya, y todo acabó en un fracaso. Periódicamente las sociedades se dejan seducir por profetas asesinos que prometen un mundo mejor, pero primero hay que limpiar en mundo actual. Hoy hay que criminalizar al hombre, pero no por ser hombre, sino por ser imprescindible para formar una familia, algo que no está en sus planes. Por tanto degradando al hombre se imposibilita la familia y se crea un nuevo orden. Más antiguo que la tana.
@dmin
Publicado a las 12:06h, 15 junioQuerido José
Resulta duro aceptar, después de muchos años, que seguimos siendo manejados por poderes como marionetas. ¿Nuestra esperanza? ¡Despertar! y no entrar en el interjuego de intereses y, sobre todo, examinar las cosas con todas las cartas boca arriba y reflexionar. Nunca fui «población de bulto» ni quiero empezar a serlo ahora. Como siempre, deseo despertar, que pensemos en esto y en todo lo que nos venden. ¡Ojalá se consiga!
Un beso y muchas gracias.
Valle
Publicado a las 11:49h, 15 junioEl 1% de la población está catalogada como psicópata. Se trata de sujetos insensibles, egoístas, despreocupados por el bienestar ajeno, que no sienten empatía ni culpa. Ese porcentaje parece ascender a un 4% en ejecutivos, políticos o personas que ostentan cargos de alta responsabilidad. Los tenemos al lado y no lo sabemos, y son tanto hombres como mujeres.
Lo mejor es poner tierra de por medio pero cuando te toca un familiar cercano es complicado.
Muy buen artículo Paloma, de los mejores que he leído. Te felicito.
@dmin
Publicado a las 12:00h, 15 junioMuchas gracias por tu valoración Valle.
Como bien dices la psicopatía abunda en nuestras vidas y los sujetos se describen como dices: ni empatía ni culpa y se suelen «amontonar en cargos de alta responsabilidad» para nuestro horror, porque no va a ser nada sencillo apartarlos y tienen la virtud de conquistar los corazones de las personas decentes y por ello ingenuas y crédulas ante su cinismo. Sí, hay que poner tierra de por medio y cruzar los dedos para no convertirte en una de sus víctimas.
Muchas gracias de nuevo, y un beso.
Pilar González
Publicado a las 13:00h, 15 junioNada que añadir, completamente de acuerdo en todo Paloma, buena tarde
@dmin
Publicado a las 14:05h, 15 junioMil gracias, Pilar:
Creo que la distinción es clara y por eso, para evitar errores descomunales, es preciso modificar la ley y en el caso de los psicópatas (si no se han suicidado) tener claro que no cabe su salida de la cárcel. No son enfermos sino muy conscientes y volverán a hacerlo sin el menor remordimiento, se asemejan a pederastas y violadores. No. No son enfermos.
Buenas tardes y un beso.
Maria del Mar Del Pino Montesinos
Publicado a las 14:18h, 15 junioMagnífico artículo y muy esclarecedor para los que no tengan las ideas muy claras. Me ha encantado Pamy… Enhorabuena!!!
@dmin
Publicado a las 14:24h, 15 junioMil gracias Mar.
Tú lo has dicho, se catalogan como machismo todas las conductas ignorando otras. Esto es un error, pues no se incluyen hechos (el de la madre, el de la novia) y el del propio marido que entran en la conducta psicopática (aunque a veces estén unidas). Espero que se tenga esta claridad de ideas en el legislador y rectifiquen.
Un beso muy fuerte.
Manuel Martín Becerra
Publicado a las 14:26h, 15 junioHombres, mujeres,madres, padres, todos iguales ante la ley
Nos quieren separados, con familias rotas. Cuanto más débiles seamos, los malos serán más fuertes
@dmin
Publicado a las 15:06h, 15 junioEstimado Manuel:
Así es. Hay que hacer prevalecer la IGUALDAD ante la ley o se cometerán muchos disparates. Eso sin perjuicio de que se actúe con todo el peso de la ley, ya se deba a un «asesinato del hombre-marido-pareja» o a un «psicópata». El apellido «machista» saca de la gravedad a la mujer y en cualquier caso: es exigible una ley implacable y menos generosidad en las salidas, especialmente de los psicópatas, en los que incluyo pederastas y violadores: todos ellos seres sin la menor empatía y con gran deseo de hacer daño «pasando» de sus víctimas.
Muchas gracias por la intervención. Un abrazo.
Carmen
Publicado a las 15:19h, 15 junioBuenas tardes Paloma! Magnífico tú escrito y tu descripción, ratifico punto, por punto , por, todo lo que has escrito, muy cierto! y efectivamente , la violencia no tiene género ! Por mucho , que algunos solo les interese la violencia machista ! Gracias por tan ilustre definición .Un abrazo y como siempre( gracias , Paloma ) eres una crack !!
@dmin
Publicado a las 17:51h, 15 junioQuerida Carmen:
Te agradezco tu opinión. La violencia no tiene género pero sí puede haber diferencia en su forma de tratarla. Si no se hubiesen quitado la vida, hay ciertos individuos, hombres o mujeres, que no deben volver a ver la luz del día porque ¡volverán a hacerlo! así que voy un paso más allá. De eso hablaré en otro artículo.
Un beso y muchas gracias.
Bárbara Ortega
Publicado a las 16:52h, 15 junio100% contigo?
@dmin
Publicado a las 17:53h, 15 junioQuerida Bárbara:
Y yo agradezco que coincidamos en algo que para mí es tan obvio como distinguir entre la noche y el día.
Un beso enorme, y mil gracias por participar.
María Ángeles Buisán Miró
Publicado a las 19:54h, 15 junioBuenas noches, Paloma: en psicología, ya no se habla de psicópata, sino de personalidad psicopática, porque no es ni una enfermedad mental ni un trastorno, es un tipo de personalidad. Efectivamente, como muy bien explicas, son personas que no tienen ninguna empatía ni compasión, incluso disfrutan y se regodean cuando ven a sus víctimas sufrir (y lo sé por propia experiencia). La ley de violencia mete en el mismo saco a la personalidad psicopática, al maltratador y al que le da un telele por las drogas o el alcohol, para así justificar una de las leyes más injustas que tenemos en nuestro código penal, como una de las partes necesarias para la imposición de un feminismo que no tiene nada que ver cn el feminismo verdadero, entre otras cosas porque no nos defiende a las mujeres sino a los transexuales, pero ese es otro tema.
Lo ocurrido en todos los casos que citas, es asesinato puro y duro, como lo que perpetraron el matrimonio de Godella. Genial, como siempre. Un abrazo, amiga.
@dmin
Publicado a las 21:35h, 15 junioMil gracias por la aclaración Mª Ángeles:
Digamos que sigo a la antigua, aunque he destacado que es un trastorno de conducta y no una enfermedad en absoluto. Por eso es tan importante modificar la ley. Obviamente es un asesinato en todos los casos cuando se infieren a la víctima (no cuando se comete contra hijos para causar más dolor) pero… en un caso, el del asesino machista, podría bastar con la condena. En el segundo caso de la personalidad psicopática no tiene cura. Volverían a hacerlo una y mil veces si se les trunca el objeto de deseo: por eso, para mí, no deberían quedar «sueltos» jamás: volverán a hacerlo. Y en ese saco meto a pederastas y violadores ¡no son enfermos! Mil gracias de nuevo y un beso.
Marina Miranda
Publicado a las 23:19h, 16 junioExcelente artículo! Nada que agregar. Por mi parte, pienso que la violencia en cualquiera de sus manifestaciones, debería ser objeto de la pena máxima. Hace falta sanear a la humanidad.
@dmin
Publicado a las 17:59h, 17 junioMil gracias Mani
Como tú, creo que cualquier tipo de violencia ha de ser perseguido hasta las últimas consecuencias. Pero el problema de «este» tipo de violencia es que está muy mal definido en las leyes. Será muy necesario que los legisladores retomen el tema para dar cabida a los múltiples supuestos familiares y se haga con todas las garantías.
Mil gracias una vez más y un beso.